martes, 15 de marzo de 2011

Cuaresma 2011

Hola de nuevo!
Bueno, he andado unos días entre deprimido y ocupado... Así que, no he podido escribir en el blog.
El pasado miércoles comenzamos la Cuaresma, con el Miércoles de Ceniza.
Al bendecir la ceniza el sacerdote decía:
"Oh Dios, que no quieres la muerte del pecador, sino su arrepentimiento,
escucha con bondad nuestras súplicas
y dígnate bendecir + esta ceniza que vamos a imponer sobre nuestra cabeza;
y porque sabemos que somos polvo y al polvo hemos de volver,
concédenos, por medio de las prácticas cuaresmales, el perdón de los pecados

así podremos alcanzar, a imagen de tu Hijo resucitado, la vida nueva de tu reino". 

Estos cuarenta días son un tiempo de preparación para la Pascua. Para celebrar la Resurrección del Señor. 
Debemos estar limpios, debemos esforzarnos por mejorar y por perfeccionarnos para cuando llegue ese tiempo.
  
Por eso Cuaresma es un tiempo de mortificación, de privaciones. "Esas prácticas cuaresmales" de las que habla la oración suelen hacerse siguiendo estas tres palabras clave: ORACIÓN, LISMONA Y AYUNO.
ORACIÓN, Amor a Dios. En este tiempo tenemos que dedicar tiempo a conocer a Aquel que dio su vida por nosotros y que se vuelve a entregar cada día en el altar.
LISMONA, Amor al prójimo. No sólo es dar dinero. También es dar nuestro tiempo para cuidar a alguien, para charlar un rato con un amigo al que hemos olvidado; dar nuestra mejor sonrisa...
AYUNO, Amor a uno mismo. Porque no todo lo que nuestro cuerpo pide, es bueno para nosotros. "Todo me es lícito, pero no todo me conviene" No es sólo ayuno de comida, abstinencia de carne (que también). También es ayuno de televisión, internet,... Apartarnos de todo aquello que nos aleja de los espiritual. Alejarnos de todas aquellas "riquezas", que como al joven rico nos impiden encontrar lo que verdaderamente nos hará feliz.


Por eso siguiendo esas claves, es bueno que nos propusiéramos algunas cositas para este tiempo. 
Para empezar, ya sabemos que la Iglesia manda guardar ayuno el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo (entre los 18 y los 59 años) y abstinencia de carne el Miércoles de Ceniza, todos los viernes de Cuaresma y el Viernes Santo (para mayores de 14 años).
Este es el mínimo. Pero podemos hacer muchas otras cosas. Aquí os dejo algunas sugerencias:
- Podríamos dedicar un rato de oración diaria. De encuentro con el Señor. Algún tipo de oración que no estemos acostumbrados a hacer: Via Crucis los viernes de Cuaresma, el Santo Rosario, laudes y vísperas... Algo así, para poder profundizar más.
- Podemos ir a visitarle a un sagrario o ir a Misa más a menudo.
- Podemos colocar un crucificado en nuestra casa, en nuestro cuarto. Y meditar mucho sobre la Pasión del Señor, rezar mucho delante del crucificado.
- Podemos leer algún texto que nos ayude a mejorar esta Cuaresma. Por ejemplo estas Reflexiones para cada día de Cuaresma: http://webcatolicodejavier.org/reflexdiacuaresma.html O podemos dedicar algún tiempo a la lectura de algún Evangelio (por ejemplo el Evangelio según San Marcos). O, quién sabe, igual podemos leernos los cuatro; porque cuarenta días dan para mucho...
 
- Podemos dedicar tiempo a hablar más con los demás, a jugar más con nuestro hermano/sobrino/hijo, a poner mejor cara cuando vamos al instituto/trabajo por las mañanas...
- Podemos dar un poquito más de TESTIMONIO de JESUCRISTO. Por ejemplo, llevar un crucifijo bien visible los viernes de Cuaresma. ¿Por qué no?
- Podemos dejar de comer algún dulce que nos guste, algún programa de TV que estemos acostumbrados a ver, no usar el ordenador algunos días a la semana...
- Y sobretodo podemos (y deberíamos) hacer un buen EXAMEN de CONCIENCIA y una BUENA CONFESIÓN para poder estar limpios para el final de la Cuaresma. 


¡Os deseo una buena y provechosa Cuaresma en la que mejoréis por medio de las prácticas cuaresmales para poder llegar a la Pascua de Jesús Resucitado!

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